Protección de los trabajadores informales que se encuentran prestando servicios de manera exclusiva a una empresa o una marca determinada.

Abstract

El proyecto de investigación en curso se centra en Colombia, una nación que destaca por su riqueza cultural y su diversidad geográfica. Sin embargo, enfrenta un desafío persistente en su entorno laboral que tiene un impacto significativo en su sociedad. En este país sudamericano, un fenómeno complejo y preocupante ha estado modelando la vida laboral de una parte considerable de su población activa: el empleo informal. Es realmente sorprendente constatar que aproximadamente el 55.8% de los trabajadores colombianos se encuentran inmersos en esta categoría laboral, caracterizada por la falta de garantías y la ausencia de protección laboral. Dentro de este grupo diverso, convergen dos realidades laborales distintas, pero igualmente desafiantes. Por un lado, se encuentran los trabajadores independientes que luchan por establecer sus propios negocios y mantenerse por cuenta propia en un entorno económico en constante cambio. Por otro lado, lamentablemente, existen aquellos que han quedado atrapados en el complicado tejido de la tercerización laboral, una tendencia en alza en Colombia. Esta práctica ha dado lugar a una serie de desafíos de carácter social, económico y legal que afectan tanto a los trabajadores como al sistema laboral en su conjunto. Sin embargo, entre los trabajadores subcontratados que desempeñan sus labores en condiciones particularmente difíciles, destacan los vendedores ambulantes de una bebida energizante ampliamente reconocida como “Vive 100”. A pesar de su contribución significativa a la economía informal del país, estos individuos enfrentan un entramado de obstáculos y desafíos en su lucha constante por mantener una fuente de ingresos que les permita sobrevivir. Esto ocurre en un entorno económico que, en ocasiones, carece de las sólidas protecciones laborales que merecen. A pesar de los esfuerzos regulatorios y las declaraciones a favor de los derechos laborales realizados por el gobierno colombiano, el caso de los vendedores ambulantes de “Vive 100” destaca la persistente falta de regulación y protección adecuada para aquellos que trabajan en condiciones precarias. Esto resalta la urgente necesidad de abordar el problema de la tercerización laboral en Colombia.