Estrategias desde las actividades rectoras para el manejo de la atención dispersa en los niños y niñas del grado primero de los centros de práctica

Abstract

La atención es un componente fundamental en el proceso de aprendizaje y desarrollo integral de los niños. En el primer grado de educación, la capacidad de mantener una atención sostenida y selectiva es crucial para absorber y asimilar los conocimientos y habilidades que formarán la base de su educación futura. Sin embargo, se observa una creciente preocupación respecto a la atención dispersa en niños de este grupo etario. La atención dispersa puede manifestarse en una serie de comportamientos, desde la dificultad para mantener el enfoque en una tarea específica hasta la propensión a distraerse fácilmente. Esta problemática no solo impacta el rendimiento académico de los niños, sino que también puede tener efectos negativos en su autoestima y motivación para aprender. Es imperativo abordar este problema de manera sistemática y efectiva. El desarrollo de estrategias pedagógicas y apoyos personalizados permitirá a los educadores y padres trabajar en conjunto para fortalecer la atención de los niños de primer grado. Al implementar técnicas que fomenten la concentración y el enfoque, se crearán ambientes de aprendizaje más propicios para el desarrollo integral de cada estudiante. Además, es crucial considerar el impacto a largo plazo de esta intervención. El fortalecimiento de la atención en esta etapa temprana no solo mejora el desempeño académico actual, sino que también sienta las bases para futuros logros educativos y profesionales. Los niños que adquieren habilidades sólidas de atención se convierten en estudiantes más autónomos y capaces de enfrentar los desafíos que se les presenten en su trayectoria educativa y en la vida cotidiana. Las estrategias para el manejo de la atención dispersa en niños de primer grado son fundamentales para su desarrollo académico y personal, la cual ayudan a los niños a adquirir habilidades esenciales que impactarán positivamente en su éxito académico, sus relaciones sociales y además de su bienestar emocional. Los niños y niñas de primer grado están en una etapa crucial para el desarrollo de las habilidades de atención y concentración, las estrategias y actividades rectoras se centran en fortalecer estas habilidades desde una edad temprana. Por otro lado, el manejo de la atención dispersa desde una edad temprana puede ayudar a prevenir o minimizar la aparición del TDAH en niños que son propensos a desarrollarlo. Estas estrategias se basan en la comprensión de las necesidades y características de los niños y niñas del grado primero. Abordan la atención dispersa al proporcionar estrategias desde las actividades rectoras, que promueven un desarrollo de la atención y la concentración.